Tan criticada por sus refractores como defendida por sus seguidores, esta modalidad que se disfruta entre los meses de Enero y Marzo (depende de la comunidad donde se pretenda cazar) se realiza con un reclamo o perdiz macho que va a ser el que nos atraiga las perdizes a cazar.

Para cazar con este sistema elegiremos un puesto. Este, aunque los hay artificiales (tela de camuflaje sin techo y con aberturas para los cañones), los naturales ofrecen meterse más en el ambiente y en la propia caza. Estos constan de tres partes que son el aguardo (lugar donde nos escondemos entre la vegetación), la rasa (espacio entre el aguardo y la posición del reclamo que suele estar a 25 metros aproximadamente) y el tanto (ubicación del reclamo que debe situarse en un lugar elevado como a un metro del suelo y camuflado con ramas para que este se sienta cómodo). Es importante preparar el puesto (sin necesidad de llevar el reclamo) unos dias antes de la caza para conseguir que las perdizes allí existentes se habitúen a la nueva imagen del lugar. Muchas veces se ocupan puestos que se crearon con anterioridad para el mismo fin, y estos deben estar separados de otros entre 200 metros y 1000 metros dependiendo de las normas que rigan el lugar.

El reclamo debe adaptarse a la jaula para cumplir en su labor. Desde finales de marzo hasta mediados de noviembre, elreclamo debe estar comodo en el "terrero" que es un cajón de madera provisto de alambres o palitos en su parte frontal y tierra normal de campo para que el habitante de este lugar cuide su higiene y le sea más facil el cambio de la pluma. Desde finales de noviembre hasta mediados de diciembre le cambiamos a la jaula para que se vaya habituando ya que poco después saldrá al campo en estas condiciones para realizar su trabajo. Por lo general, el reclamo deberá habitar en una zona cálida de la casa.

Se caza en estos meses porque es la época del celo del macho y es a partir de este momento cuando dejan de ser cordiales vecinos y comienzan a imponerse y demostrar ser el más fuerte (tras un incesante cambio dialectico de cantos) con el fin de quedarse con la parcela donde haya mayor cantidad de alimento y atraer a las hembras.

La caza se suele realizar al alba o por la tarde. "Al alba" es el primer puesto, comienza al amanecer y dura pocos minutos. En esta fase no conviene llevar un reclamo joven pues al despuntar el día todos los machos lanzan sus cánticos y esto puede acobardar al nuestro por no tener experiencia y sentirse inferior. El siguiente puesto es el "de sol" que comienza sobre las diez de la mañana y suele durar dos horas y media. Aquí si que es necesario un buen macho que demuestre su valía, que mueva bien el campo y atraiga a otros con su buen cantar. El puesto llamado "de tarde" es el que empieza a partir de las tres y media y tiene buena aceptación por parte de las perdices ya que en esta hora demuestran más actividad. En este puesto, cuando podemos arriesgarnos con más posibilidades de éxito en utilizar como reclamo un macho joven, porque a estas horas aunque más activos, también suelen estar más callados Siempre dependiendo de las normas en vigor de cada municipio o coto o comunidad, pueden prohibirse alguno de estos puestos o incluso aumentarse con dos más que serían el "puesto de sesteo" y el "de dormida". Ambos se situan entre los puestos de sol y de tarde..

El cazador se coloca en su puesto y espera pacientemente. El reclamo comenzará a cantar y un macho que esté cerca, creyendo que este quiere ocupar su lugar y que con la lucha dialéctica no se retira, acudirá a la cita personalmente para echarlo. El cazador debe aguardar a que aparezca su hembra y esperar a abatirlos a los dos de un solo disparo. En caso de no ser posible, abatirá primero a la hembra porque de esta manera, aunque el macho huya, al estar encelado volverá y será el momento de darle caza. Es importante haber colocado el reclamo en un sitio alto porque así lo oyen mejor, nos evitamos que lo puedan dañar con peleas y no tendremos reparo en disparar aunque esté en nuestra linea de tiro (si es posible debemos evitarlo pues se puede escapar algún perdigon)

El buen cazador prefiere actuar sin prisas y abatir la pieza de un disparo certero con lo cual muera en el acto (en muchos casos no existe segunda oportunidad). El disparo se suele realizar apuntando al perfil o a la espalda. Si bien estos disparos son mortíferos, más lo es dispararle el tiro a la pechuga (al collar negro) pero no es un tiro que guste efectuar.

Uno de los mejores momentos que tiene esta técnica es el lance de la caza cuando cobramos la pieza cazada pero sin duda para el buen cazador hay otro momento lleno de tensión que se produce cuando está a la espera de que aparezca el rival de nuestro reclamo y mientras se deleita con los tipos de canto de los machos como son por ejemplo y entre otros "el cañon" (el macho se presenta o llama y es un canto muy fuerte), "el picheo" (sonidos fuertes d etemory los emiten al asustarlos), la "riña" (que es señal de peligro), el "rajeo" (señal de enfado), el "aguileo" (lo emiten ante la presencia de algún peligro como una rapaz), "el piñoneo" (son como trucos para atraer a otras perdices), el "titeo" (invitaciones corteses y seductoras para atraer hembras) o "la embucha" (lo oye el cazador acostumbrado porque es muy bajito y anuncia la llegada de una perdiz.

Aunque los calibres 16 y 20 también se utilizan , el idoneo es el 12 y con chokes de 3 ó 4 estrellas tendremos suficiente. Se recomiendad igualmente cartuchos de 28 a 32 gramos con perdigones del 7, 7,5, 

De igual manera, se pueden usar escopetas superpuestas, yuxtapuestas o superpuestas, aunque lo que no se aconseja es la de estractores automáticos pues son ruidosas u aquí cuanto menos ruido causemos mucho mejor.

Solamente en las comunidades autónomas que lo autorizen podremos realizar esta técnica de caza. El reclamo siendo hembra está totalmente prohibido.